La opinión indebida del Dépor Unionistas en Riazor

La opinión indebida del Dépor Unionistas en Riazor

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Los vemos volver - Key Galán

Lo cantan desde los terribles descensos, con números de locos, números de no descenso, de Primera y Segunda. La hinchada deportivista, los que no han abandonado a su equipo nunca, en las malas y en las muy malas, ahora siguen en el infierno que más calienta, gritan desde sus asientos al cielo el repetitivo y pegadizo cantico: Nos van a ver volver.

Y sí, amigos, están en el proceso bueno de volver, se encuentran en la senda correcta para el retorno, primero a la Plata y luego al Oro. Y así el histórico Real Club Deportivo de La Coruña está reescribiendo sus andanzas en el fútbol nacional, sin desaliento, con mucho sufrimiento y con alegrías, que sin ser para tirar cohetes, se celebran como un respiro de alivio en medio del oscuro paraje en el que se encuentran en competiciones federativas.

Unionistas de Salamanca y su gente, en este proceso con forma de ola buena, como fieles observadores de la realidad de la categoría, ven como el equipo de Imanol, que a comienzos no carburaba, va como un lobo hambriento camino de cazar a la Segunda División. Cierto es que a este lobo le falta algo de pegada en la mordida final, que caza rápido y bien, es indiscutible, pero la realidad es que su presa no se desangra hasta el pitido final y que en alguna que otra ocasión, su rival, con aliento vital hasta el último suspiro de partido, se le puede escapar vivo entre los dientes.

El conjunto herculino, muy superior a Unionistas en todos los pasajes de encuentro, le faltó dar la puntilla antes de los 90 minutos. Su juego, a un ritmo inalcanzable para los de Ponz, dibuja cabriolas de otra categoría. Un ambiente de Primera, en un estadio de Primera y todo ello en Primera Federación, chirria y mucho.

Ese aroma de días de rosas, de buen fútbol y salitre, que vendrán en unos meses, es el que se respiraba desde el sábado en Coruña. Una ciudad y unos aficionados, unidos por un sentimiento de pertenencia son algo maravilloso. Sabedores que este año es el bueno, espero que sí, sus gentes te reciben con los brazos abiertos y nunca te sientes forastero en ningún rincón de la preciosa ciudad coruñesa. Con gente de la casa, que ha mamado la elástica blanquiazul desde la cuna y que respeta ese escudo, que no hace mucho era temido en toda Europa, hace que la empresa del ascenso esté más cerca.

Unionistas de Salamanca compitió. Prácticamente, desbordados desde el pitido inicial hasta el final, los charros se mantuvieron a flote en su bloque bajo y con un estelar Iván Martínez, que está para renovar ya, se mantuvo a flote hasta el final. Portero, Iván, que trasmite una energía felina en todas sus actuaciones.

Sigo diciendo que Unionistas tiene dos porterazos esta temporada y ahí se ha basado, una parte importante, que los nuestros, desde los palos, compitan siempre.

Me alegro que Coruña y Su Dépor salga del ostracismo futbolero en el que se encuentran. Esa buena gente se merece lo mejor y nosotros nos alegramos.

Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver - Por Yuri Ramos

Como dice Joaquín Sabina en una de sus canciones, no debiéramos volver a A Coruña. Y sé que todos el unionismo estaría encantado de regresar la temporada que viene; Coruña y los deportivistas nos tienen ganados para siempre. Qué bonito es el fútbol cuando puedes compartir un día con aficionados del equipo rival, sabiendo que, aunque todos queramos ganar, duele menos perder.

Y qué impresionante es ver un estadio como Riazor rozando el lleno. Impresiona y llena el alma de alegría ver el campo así. Cuando asomé por el vomitorio de la puerta 20 aluciné. El resultado iba a ser lo de menos, al menos para mí.

Del partido por mi parte poco que comentar. Estaba embriagado con el ambiente. Un Dépor superior pero fallón se llevó el partido de manera justa, pero exigua. No tuvimos ocasiones, aunque ver al portero subir al remate final denota que alguna posibilidad hubo. Yeremai y Mella son muy buenos, eso sí que quería remarcarlo. Pero no solo ellos.

Realmente creo que casi todos salimos bastante contentos por lo vivido. No puedo decir que hiciéramos fútbol champagne, fue más fútbol champín, pero si es la última vez que visitamos Riazor contra un Dépor de 1ª Federación la ocasión no defraudó.

Estoy seguro que van a subir, y lo harán como primeros.

Forza Dépor, os vamos a ver volver!!!

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